Dismenorrea: La menstruación no debe afectar tu calidad de vida.

La dismenorrea (del griego dys-: dificultad, (em)mēn(a): menstruación, y rhoíā: flujo) es una menstruación dolorosa. Más de la mitad de las mujeres que menstrúan, experimentan algo de dolor leve durante 1 - 2 días al mes; sin embargo la dismenorrea se considera una complicación de la función menstrual, caracterizada por períodos menstruales severamente dolorosos que impide durante varios días al mes la ejecución de las actividades cotidianas.

Tipos de Dismenorrea:

Dismenorrea primaria: 

Se refiere al dolor menstrual que ocurre más o menos hacia el momento de la menarquia en mujeres por lo demás sanas. Generalmente no está asociado a problemas específicos en el útero u otros órganos pélvicos. Se piensa que el aumento de la actividad de unas sustancias llamadas prostaglandinas juegan un papel en esta afección. Estas sustancias, que se producen en el endometrio (la capa que reviste por dentro el útero), se encuentran muy elevadas al inicio de la menstruación y van disminuyendo a medida que pasan los días y se va desprendiendo el endometrio, ese es el motivo por el cual los cólicos disminuyen con el paso de los días.

Dismenorrea secundaria: 

Es el dolor menstrual que se desarrolla posteriormente, en mujeres que antes habían cursado con períodos menstruales normales. Con frecuencia, está relacionada con problemas en el útero u otros órganos pélvicos como: 

- Endometriosis.

- Miomas.
- Dispositivo intrauterino (DIU) hecho de cobre.
- Enfermedad inflamatoria pélvica.
- Síndrome premenstrual (SPM).
- Infección de transmisión sexual.
- Estrés y ansiedad.

Diagnóstico:

Un buen interrogatorio y examen ginecológico permitirá determinar la causa de la dismenorrea. También puede apoyarse en evaluaciones adicionales que permitan orientar el diagnóstico y por ende el tratamiento. Los exámenes y procedimientos que se pueden realizar abarcan:

- Ecografía.
- Hematología completa.

- Cultivos para descartar infecciones de transmisión sexual.

- Laparoscopia.

- Histeroscopia.

Tratamiento: 

Las siguientes medidas generales te pueden ayudar a mejorar la dismenorrea:

- Aplicar una almohadilla térmica en el abdomen bajo, debajo del ombligo. Nunca te duermas con la almohadilla encendida.

- Hacer masajes circulares suaves con las puntas de los dedos alrededor del abdomen bajo.

- Beber líquidos calientes.

- Comer poco pero con frecuencia.

- Mantener las piernas elevadas mientras estás acostada o acostarte de lado con las piernas dobladas.

- Practicar técnicas de relajación como meditación o yoga.

- Usar medicamentos antinflamatorios de venta libre como ibuprofeno. Comienza a tomarlo el día antes al inicio esperado del período y continúa tomándolo regularmente durante los primeros días de dicho período.

- Tomar duchas o baños calientes.

- Caminar o hacer ejercicios con regularidad, incluso ejercicios de balanceo pélvico.

- Bajar de peso si tiene sobrepeso. Haga ejercicio aeróbico regular.

El tratamiento médico específico dependerá de la causa de la dismenorrea, y puede varias desde pastillas anticonceptivas, uso de DIU de progestágenos (Mirena), antinflamatorios, antibióticos e incluso en ciertos casos la laparoscopia terapéutica.

Debes coordinar de inmediato una cita con tu ginecólogo si presentas:
- Menstruaciones con dolor intenso y/o incapacitante.

- Aumento del flujo vaginal o flujo vaginal de mal olor.
- Fiebre y dolor pélvico.
- Dolor repentino o intenso, especialmente si tu período se retrasa por más de una semana y has estado sexualmente activa.
- Menstruaciones abundantes o con coágulos.
- El dolor ocurre en momentos diferentes a la menstruación, empieza más de 5 días antes del período menstrual o continúa después de que el período ha terminado.

Por Dra. Maria Andreina Agüero

Ginecólogo - Obstetra

Endoscopia Ginecológica

Ginecoestética